LEVANTATE Y ANDA

En un partido memorable, Defensores de Hattrick venció a Flavio Pedemonti por 3 a 2, tras remontar una desventaja de dos goles.
Ignacio Arigos y Andrés Uboldi, en dos oportunidades, anotaron para el elenco tricolor.

Luego de un parate de quince días, el Defe debía enfrentar a uno de los equipos más débiles del torneo, en busca de una victoria que le permitieran meterse de lleno en la pelea por el ascenso.

Y ya desde el primer minuto de juego, los de Montalvetti asumieron el protagonismo, saliendo a jugar bien lejos de su arco, y manejando la pelota con soltura.

Las oportunidades de gol comenzaron a sucederse una tras otra, pero Juan Pablo Rodríguez y Pablo Uboldi desperdiciaron las dos más claras, y el travesaño devolvió un enorme remate de Alejandro Pardo, por lo que el partido se fue al descanso sin goles.

Ya en el complemento, el Defe siguió yendo en busca del primero, ante un rival que al verse superado, buscó llevar el partido al terreno del roce.
Poco inteligente, el tricolor entró en ese juego, lo que benefició a Pedemonti, que emparejó el trámite del encuentro, y aprovechó una distracción defensiva para ponerse en ventaja.

Poco después, el árbitro, de pésima actuación, no vio un claro golpe sobre el rostro de Miguel Ángel Pérez, y de esa jugada nació en el segundo de los de negro, a pesar de las protestas de los jugadores defesianos.

El equipo parecía vencido, pero en un puñado de minutos, el partido dio un giro inesperado, gracias a la expulsión de un defensor rival, y a los goles de Ignacio Arigos, y de Andrés Uboldi.

A partir de ahí, fue todo del Defe, que buscó el gol de la victoria con alma y vida, y lo encontró tras un gran desborde y posterior asistencia de Pablo Uboldi, para su hermano Andrés, quien solo tuvo que empujarla.

En los minutos finales, Alejandro Pardo, Alan Lell y Juan Pablo Rodríguez desaprovecharon ocasiones para liquidar el partido, y el equipo pudo haberlo pagado caro, ya que en la última jugada del partido Ramiro Méndez cometió un claro penal, que el árbitro no sancionó.

Si bien, la poca efectividad en ataque y las distracciones en defensa siguen siendo déficits a corregir, Defensores de Hattrick aprobó un duro examen, mostrando buen juego y actitud.
Quedan cinco finales y las chances de ascender siguen intactas. A seguir por este camino Defe.

A continuación el uno por uno:

Adrian Batyk (8): Hizo siempre la más fácil, y cuando tuvo que aparecer lo hizo con dos tapadas impresionantes.

Pablo Uboldi (9): Descomunal. Clausuró su lateral, se proyectó seguido, y solo pudieron frenarlo con infracciones. Fue el autor intelectual del gol del triunfo.

Rodrigo Martínez (5): Su error en el segundo gol rival condiciona cualquier análisis. El resto del encuentro, cumplió.

Maximiliano Mothe (6): Buen partido del lateral. Se mostró seguro en la marca y se sumó al ataque con mucho criterio.

Ramiro Méndez (4): Se lo notó nervioso y errático. Llegó tarde en el primer gol, y en la última jugada del partido cometió un penal infantil, que el árbitro no sancionó.

Miguel Pérez Baina (4,5): Floja labor del mediocampista central. Estuvo mal en la recuperación, y perdió muchas pelotas que le trajeron más de un dolor de cabeza a la última linea defesiana.

Diego Parini (9): Enorme actuación de “El Pibe”. Corrió, recuperó, distribuyó y también generó juego. Una bestia.

Alan Lell (6): Gran despliegue para recorrer toda la banda. Colaboró en la recuperación y pisó el área con asiduidad.

Ignacio Arigos (8): Ingresó en el peor momento del equipo y su aporte fue clave. Mostró un nivel superlativo, y anotó el gol que inició la remontada.

Juan Pablo Rodriguez (6,5): Si bien redondeó un buen partido, mostró fallas a la hora de definir, algo que se viene repitiendo en los últimos partidos.

Alejandro Pardo (7,5): Se despertó cuando el equipo más lo necesitaba, y a fuerza de velocidad y habilidad se volvió imparable para la defensa rival. Solo le faltó el gol.

Andres Uboldi (8,5): Jugó de punta definido, como se le pedía, y los resultados están a la vista. Hizo un gran partido, y convirtió dos goles que mantienen viva la ilusión tricolor.

Gabriel Montalvetti - DT (8): Puede sonar repetitivo, pero es imposible obviar su capacidad para leer los partidos. Cuando la victoria parecía un imposible, modificó la disposición del mediocampo, y el equipo se llevo los tres puntos. Un crack.